- Once comedores comunitarios fortalecen el desarrollo infantil en Durango.
- Alimentación diseñada para el bienestar físico y mental de los más vulnerables de la gran familia.
Durango, Dgo.
Gracias al compromiso del gobierno municipal con la gran familia duranguense, este enero niñas y niños regresaron a las aulas mejor preparados, gracias a los beneficios que reciben en los comedores comunitarios del municipio. Estos espacios ofrecen alimentación con alto contenido nutricional, lo que contribuye a que los pequeños asistan a clases en óptimas condiciones físicas y anímicas, listos para aprender más y mejor.
Efraín de los Ríos, director del DIF Municipal, destacó que actualmente operan 11 comedores en diferentes puntos del municipio, con un alcance que atiende a las zonas de mayor vulnerabilidad alimentaria.
«Estamos entregando raciones diarias diseñadas específicamente para cada niña y niño, cuidando su desarrollo físico y mental. En un par de semanas estaremos abriendo el comedor número 12, con el objetivo de alcanzar y quizá superar, la meta de 14 antes de que termine la administración», explicó.
Además, los comedores cuentan con un equipo profesional que incluye nutriólogas, trabajadoras sociales y psicólogas, quienes no solo cuidan la alimentación, sino también el bienestar emocional de los beneficiarios. Las familias también son parte importante de este programa, pues reciben capacitaciones en oficios y acceso a microcréditos, fomentando su autosuficiencia.
«Es en edades de 3 a 6 años donde la alimentación adecuada es clave para el desarrollo integral de las niñas y los niños. Este programa no solo les da energía para aprender, sino que mejora su calidad de vida y les enseña hábitos saludables para el futuro», subrayó de los Ríos.
Los comedores comunitarios son un ejemplo de cómo Durango sigue avanzando con acciones que fortalecen el presente y aseguran un mejor futuro para sus ciudadanos.